Escrito por Patro el 28 febrero, 2015. Posteado en Libertad
Un principio de todo delincuente, es apelar a la moral de su víctima, para salir bien librado de cualquier situación que lo perjudique.
Por ejemplo: si usted toma a un delincuente infraganti y no le deja escapatoria, va a llorar por su familia, y por el hambre que tienen todos, también va a recurrir a señalar que usted, buen ciudadano no es una persona violenta.
El uso de la moral como escudo de defensa no solo trabaja a bajo nivel de un simple ladrón, sino en las más altas esferas, los amorales buscan dominar al resto con la moral, porque es un arma económica y simple de usar.
¿Cómo es esto?
Es la herramienta más simple, económica y hasta útil para cualquier dictador de turno, a ti cada vez que salgas a intentar hacer escuchar tu voz te van a decir que quieres realizar un golpe de Estado a un gobierno democrático. Han existido democracias muy sangrientas, como la Alemania Democrática que durante la guerra fría funcionaba mas como una cárcel que como un país democrático, está de más decir que todos los años los alemanes “democráticos” tenían oportunidad de votar al único partido imperante, y te aseguro que han usado las mismas herramientas de dominio.
Otra arista de esta herramienta del perfecto dictador es quitar a quien levanta la voz, la altura moral correspondiente, en la mayoría de las oportunidades con acusaciones falsas, señalando la acción, pero nunca respondiendo a las acusaciones que les son planteadas. Los ciudadanos que se asustan de la moral, van a tomar distancia de aquel que es señalado, y ahí al igual que las ovejas se apartan del carnero mal herido para no ser víctimas de los chacales, es cuando el que levanto su voz y sus acciones contra un régimen se ve solo e incluso acorralado por sus propios vecinos.
El último engranaje, es quien supuestamente está contra la tiranía, que por su moral, no ve como defensa los actos de los ciudadanos que desean ver un gobierno corrupto lejos de sus vidas, sino que les coloca la etiqueta como un acto de violencia, cuando la violencia en realidad parte desde el mismo poder.
Cuando la amoralidad se apodera de tu vida en manos de una banda criminal en riendas del gobierno, defender a tus hijos y nietos de la esclavitud de un gobierno corrupto no es un acto inmoral, sino natural de todo ser vivo de defender a su gente y a su propia vida.
Por: Patro Kieran | Foto: dcinehd.com
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